Esta cubierta se diseñó para que el club de tenis de Odrimont en Bélgica, pudiese aprovechar sus pistas los 365 días del año. Este club se encuentra en una zona lluviosa en la que azotan rachas de viento muy intensas, por eso necesitaban un pabellón que protegiese a los deportistas mientras juegan. El pabellón se fabricó con una estructura de celosía y un anclaje pensado para ese entorno climático.